Entretener a los niños haciendo manualidades es una de las formas más fáciles y hasta económicas de hacerles pasar un buen día. Algunas pueden ser muy elaboradas o muy simples y sencillas, en realidad no importa; lo interesante es despertar el espíritu creativo e individual de cada niño y animar a explorarlo a través de todos sus sentidos.
Colores y diseños
Pintar cuadros con pinturas acrílicas o de agua es divertido y llamativo para los niños. También se puede conseguir una manta o sábana vieja y dejar que lo utilicen como lienzo estilo Jackson Pollock, o utilizar frascos de vidrio vacíos para decorarlos y rellenarlos con cualquier cosa. Otra opción es recortar revistas o fotografías para crear cuadros o collages con aquello que al niño le encante.
Cocina
Un poco de gastronomía y repostería permite a los niños ensuciarse las manos de manera deliciosa mientras crean galletas, tartas o gelatinas de diferentes colores, texturas y sabores. No importa si el resultado no es el mejor, lo que cuenta es la inventiva de los pequeños y el haberlo preparado con sus propias manos.
Jugar a disfrazarse
Aquí entra la creatividad y el ingenio de los niños para lograr obtener un disfraz con los materiales que tengan a la mano. Papeles de colores, telas viejas, pegamento, pinturas, botones, imágenes…todo puede servir para crear un diseño alegre y que ellos mismos hayan creado con un poco de ayuda.
Alcancías con engrudo
Hacer alcancías con periódico y engrudo no sólo divertirá a los niños, también los enseñará a comenzar a ahorrar. Para formarla se puede utilizar un globo sobre el cual se pone el engrudo (harina mezclada con agua) y periódico o papel de varios colores.
Actividades con las manos
Se puede moldear plastilina u otros materiales como barro para crear maquetas o diseños temáticos entre varios niños. Y, si se está en la playa, no se debe desaprovechar la ocasión de hacer castillos y figuras en la arena.