Fomentar la lectura, especialmente en niños, siempre es algo positivo y satisfactorio y nada mejor que empezar con una de las festividades más esperadas y divertidas del año. Y es que, aunque ver una buena película de terror siempre es bueno, el leer la descripción de pasajes terroríficos es simplemente incomparable. Aquí algunas sugerencias para comenzar:
Para niños y adolescentes
La saga de “Crepúsculo” escrita por Stephenie Meyer es una amena opción para que los más jóvenes se deleiten con vampiros y hombres lobo, aunque quizás sea una alternativa más entretenida para las niñas pues el eje central de la historia es el romance entre una mortal y un vampiro.
Otra posibilidad es la serie “Cazadores de Sombras” escrita por Cassandra Clare, en cuyo argumento destaca una élite de guerreros antiguos que combaten demonios para proteger a los simples mortales.
Los clásicos
Definitivamente “Frankenstein” de Mary Shelley es un absoluto clásico. La narrativa ligera y entretenida nos lleva a un análisis casi psicológico no sólo del Dr. Frankenstein, sino también de su creación, el monstruo legendario del cual el lector, si no se enamora, al menos sí comienza a comprenderlo y a ver claramente la razón de sus acciones.
Otro clásico imperdible es “Drácula” de Bram Stoker, el cual se encuentra basado en el conde sanguinario conocido como Vlad el Empalador pues era justo eso lo que hacía con sus enemigos: los empalaba en pleno campo de batalla. Ambientada en los Montes Cárpatos de Rumania, esta novela es una delicia para ser leída durante estas fechas.
Stephen King
Por último, una opción que debe considerarse es la colección de libros del autor Stephen King, llamado también “el amo del terror”. Desde su primera novela tan popular “Carrie” hasta sus últimos libros más enfocados al suspenso que al terror, Stephen King ha dejado un auténtico legado de historias que merecen la pena ser leídas.
Algunos de sus libros más populares incluyen “El Resplandor”, “Eso”, “Cujo”, “Cementerio de Animales” y “La tienda de los deseos malignos”. Muchas de sus obras han sido llevadas al cine, lo que seguramente se seguirá repitiendo pues el autor originario de Maine continúa publicando novelas cada año.
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